SED POR EL DIOS VIVO

“He aquí vienen días, dice Jehová el Señor, en los cuales enviaré hambre a la tierra, no hambre de pan, ni sed de agua, sino de oír la Palabra de Jehová” Amos 8:11

sábado, 5 de septiembre de 2015

Cristo cumplió su propósito

En un pueblo de Israel llamado Belén de Judea,
en días del Rey Herodes sucede el nacimiento de Jesús, un Rey nacido en condición muy humilde, fue en un pesebre un lugar destinado para los animales de corral como las vacas, asnos y otros, en ese sitio aparece por primera vez el Cristo, el enviado de Dios para traer salvación a toda la humanidad, porque el mundo entero estaba bajo el dominio del pecado, solamente alguien perfecto podía redimir a toda la humanidad y esa persona no estaba en la tierra, ese ser perfecto se encontraba en el cielo donde esta Dios reinando sobre todo el universo, esa persona redentora tenia su lugar a la diestra del Padre Celestial, era Jesucristo el hijo unigénito de Dios, solo Él poseía las cualidades para redimir a todos los estaban bajo la potestad de satanás el dios de este mundo, que no ha conocido al Rey de Reyes a Jesucristo nuestro único Señor y Salvador, es por Amor que Dios el Todopoderoso envía a hijo amado a esta tierra, donde el pecado, la maldad, la desobediencia y otras iniquidades son cometidas por los seres humanos que habitamos en este planeta llamado la tierra, para que hubiese el perdón de los pecados el hijo de Dios debía morir en una cruenta cruz, que era el instrumento usado por el imperio Romano para dar muerte a los malhechores mas terribles, siendo Jesucristo Justo, santo y perfecto moría como un delincuente, porque Cristo Jesús hace ese sacrificio tan doloroso, por la razón de que Dios nos amo tanto que dio a su único hijo, como dice la Palabra del Señor en San Juan 3:16 que dice: Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. El plan de Dios es que nadie se pierda, por ello ha dado lo que mas amaba su unigénito hijo para ser sacrificado, para que todo aquel que en el cree no se pierda en la condenación del infierno, sino que tenga la vida eterna junto con Cristo en el Reino de los cielos por toda la eternidad, el sacrificio del Señor Jesucristo no es en vano, tiene promesas de salvación para todo aquel que con un corazón contrito y humillado se acerca al Dios y Padre de nuestro redentor Jesucristo, el único camino a Dios como esta escrito en San Juan 14:6 que dice: Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. El Señor Jesús se presenta así mismo como el camino hacia Dios el Padre, como la verdad en que se puede confiar sin titubear, como la vida que produce vida espiritual y eterna si tan solo se pone la fe en el resucitado y eterno Jesucristo